Lewis Carroll (Gran Bretaña, 27.1.1832 - 14.1.1898) - Inglés escritor infantil, matemático, lógico.
Nombre real: Charles Lutwidge Dodgson.
Bajo el nombre de Lewis Carroll, el matemático inglés Charles Lutwidge Dodgson se hizo conocido en todo el mundo como el creador de Las aventuras de Alicia en el país de las maravillas, uno de los libros para niños más populares.
Nacido el 27 de enero de 1832 en Daresbury, cerca de Warrington (Cheshire), en la familia de un párroco. Era el tercer hijo y el mayor de una familia de cuatro niños y siete niñas. Cuando era niño, Dodgson inventó juegos, compuso cuentos y rimas y hizo dibujos para sus hermanos y hermanas menores.
La educación de Dodgson hasta los doce años está a cargo de su padre.
1844-1846: estudios en la Richmond Grammar School.
1846-1850 – estudios en la Escuela de Rugby, privilegiados institución educativa tipo cerrado, lo que provoca hostilidad en Dodgson. Sin embargo, aquí muestra habilidades sobresalientes en matemáticas y lenguas clásicas.
1850: se matricula en Christ Church College, Universidad de Oxford y se traslada a Oxford.
1851: gana el concurso de becas Boulter.
1852 – recibió honores de primera clase en matemáticas y segunda clase en lenguas clásicas y literaturas antiguas. Gracias a sus logros, se le permite realizar trabajos científicos.
1855 - A Dodgson se le ofreció una cátedra en su universidad, cuya condición tradicional en esos años era recibir las órdenes sagradas y el voto de celibato. Dodgson teme que debido a su ordenación tendrá que abandonar sus actividades favoritas: la fotografía y el teatro.
1856, entre otras cosas, fue también el año en que el Sr. Dodgson comenzó sus estudios de fotografía. Durante su pasión por este arte (dejó de filmar en 1880 por razones desconocidas), creó alrededor de 3.000 fotografías, de las cuales menos de 1.000 han sobrevivido.
1858 – “El quinto libro de Euclides tratado algebraicamente”, 2ª ed.
1860 – “Notas sobre planimetría algebraica” (Un programa de estudios de geometría algebraica plana).
1861 – Dodgson es ordenado diácono, el primer paso intermedio para convertirse en sacerdote. Sin embargo, los cambios en el estatus de las universidades eliminan la necesidad de dar más pasos en esta dirección.
1 de julio de 1862: en un paseo cerca de Godstow, en la parte superior del Támesis, con los hijos de Liddell, el decano de Christ Church College, Lorina, Alice (Alice), Edith y Canon Duckworth, Dodgson cuenta la historia de que Alice, una de sus favoritas. que se ha convertido en la heroína de las improvisaciones, pide que le escriban. Lo hará durante los próximos meses. Luego, siguiendo el consejo de Henry Kingsley y J. MacDonald, reescribe el libro para obtener más información. amplia gama lectores, agregando algunas historias más contadas anteriormente a los niños Liddell.
1865 - Las aventuras de Alicia en el país de las maravillas se publican bajo el seudónimo de Lewis Carroll (primero, el nombre inglés Charles Lutwidge se latinizó como Carolus Ludovicus, y luego ambos nombres se intercambiaron y se volvieron a anglicanizar).
1867 – trabajo científico Un tratado elemental sobre los determinantes.
En el mismo año, Dodgson primero y ultima vez Deja Inglaterra y hace un viaje a Rusia muy inusual para aquellos tiempos. En el camino visita Calais, Bruselas, Potsdam, Danzig, Koenigsberg, pasa un mes en Rusia y regresa a Inglaterra vía Vilna, Varsovia, Ems, París. En Rusia, Dodgson visita San Petersburgo y sus alrededores, Moscú, Sergiev Posad y una feria en Nizhny Novgorod.
1871 - Se publica una secuela de Alicia (también basada en historias anteriores y posteriores contadas a los jóvenes Liddell en Charlton Kings, cerca de Cheltenham, en abril de 1863), titulada A través del espejo y lo que Alicia encontró allí, año en cuestión. 1872). Ambos libros están ilustrados por D. Tenniel (1820-1914), quien siguió exactamente las instrucciones de Dodgson.
1876 – epopeya poética en el género del disparate “La caza del Snark”.
1879 – trabajo científico “Euclides y sus rivales modernos”.
1883 – colección de poemas “¿Poemas? ¿Significado?" (¿Rima? ¿Y razón?).
1888 – trabajo científico “Curiosidades Matemáticas” (Curiosa Mathematica, 2ª ed. 1893).
1889 – novela “Sylvie y Bruno” (Sylvie y Bruno).
1893 - segundo volumen de la novela "Sylvie y Bruno" - "La conclusión de Sylvie y Bruno" (Sylvie y Bruno concluyeron). Ambos volúmenes se distinguen por la complejidad de su composición y la mezcla de elementos de narrativa realista y cuento de hadas.
1896 – trabajo científico “Lógica simbólica”.
1898 – colección de poemas “Tres atardeceres”.
14 de enero de 1898: Charles Lutwidge Dodgson murió en la casa de su hermana en Guildford de neumonía, dos semanas antes de cumplir 66 años. Enterrado en el cementerio de Guilford.
Matemático Dodgson
Los trabajos matemáticos de Dodgson no dejaron ninguna huella notable en la historia de las matemáticas. Su educación matemática se limitó al conocimiento de varios libros de los “Elementos” del antiguo matemático griego Euclides, los fundamentos del álgebra lineal, el análisis matemático y la teoría de la probabilidad; Claramente, esto no fue suficiente para trabajar en la "vanguardia" de la ciencia matemática del siglo XIX, que estaba experimentando un período de rápido desarrollo (la teoría del matemático francés Galois, la geometría no euclidiana del matemático ruso Nikolai Ivanovich Lobachevsky y el matemático húngaro Janusz Bolyai, la física matemática, la teoría cualitativa de las ecuaciones diferenciales, etc.). El aislamiento esencialmente completo de Dodgson mundo científico: aparte de breves visitas a Londres, Bath y sus hermanas, Dodgson pasó todo su tiempo en Oxford, y sólo en 1867 su forma de vida habitual se vio alterada por un viaje a la lejana Rusia (Dodgson describió sus impresiones de este viaje en el famoso " Diario ruso”). EN Últimamente El legado matemático de Dodgson está atrayendo cada vez más la atención de los investigadores que están descubriendo sus inesperados descubrimientos matemáticos que no han sido reclamados.
Los logros de Dodgson en el campo de la lógica matemática estuvieron muy adelantados a su tiempo. Desarrolló una técnica gráfica para resolver problemas lógicos, más conveniente que los diagramas del matemático, mecánico, físico y astrónomo Leonhard Euler o el lógico inglés John Venn. arte especial Dodgson logró los llamados “sorites” en su solución. sorites es problema de lógica, que es una cadena de silogismos en la que la conclusión retirada de un silogismo sirve como premisa de otro (además, las premisas restantes están mezcladas; "sorites" en griego significa "montón"). C. L. Dodgson describió sus logros en el campo de la lógica matemática en los dos volúmenes "Lógica simbólica" (el segundo volumen se encontró recientemente en forma de galeras en el archivo del oponente científico de Dodgson) y, en una versión simplificada para niños, en el “Juego de Lógica”.
Escritor Lewis Carroll
La originalidad única del estilo de Carroll se debe a la trinidad de su don literario de pensar como matemático y su lógica sofisticada. Contrariamente a la creencia popular de que Carroll, junto con Edward Lear, puede ser considerado el fundador de la "poesía sin sentido", Lewis Carroll en realidad creó un género diferente de "literatura paradójica": sus personajes no violan la lógica, sino, por el contrario, Síguelo, llevando la lógica al punto del absurdo.
Lo más significativo obras literarias Se consideran con razón dos cuentos de hadas de Carroll Lewis sobre Alicia: "Alicia en el país de las maravillas" (1865) y "A través del espejo y lo que Alicia vio allí" (1871), generalmente llamados "Alicia a través del espejo" por brevedad. Experimentos audaces con el lenguaje, muchas cuestiones lógicas y filosóficas sutiles abordadas en los cuentos de hadas sobre Alicia, polisemia ("polisemantismo") de declaraciones caracteres y las situaciones hacen que las obras “infantiles” de Carroll sean la lectura favorita de los “sabios canosos”.
Las características del estilo único de Carroll se notan claramente en otras obras de Carroll: "Sylvie y Bruno", "La caza del Snark", "Problemas de medianoche", "La historia del nudo", "Lo que la tortuga le dijo a Aquiles", "Allen Brown y Carr”, “Euclides y sus rivales modernos”, cartas a los niños.
L. Carroll fue uno de los primeros fotógrafos ingleses. Sus obras se distinguen por la naturalidad y la poesía, especialmente fotografías de niños. sobre el famoso exposición Internacional fotografías "La raza humana" (1956) de fotógrafos ingleses del siglo XIX estuvo representada por una sola fotografía de Lewis Carroll.
En Rusia, Carroll es ampliamente conocido desde finales del siglo pasado. Los cuentos de hadas sobre Alicia han sido traducidos y contados repetidamente (y con distintos grados de éxito) al ruso, en particular por Vladimir Vladimirovich Nabokov. Pero uno de mejores traducciones realizado por Boris Vladimirovich Zakhoder. Las historias inventadas por Carroll aman no solo a los niños, sino también a los adultos.
Nacimiento del seudónimo "Carroll Lewis"
El editor y escritor de revistas Edmund Yates aconsejó a Dodgson que creara un seudónimo, y en los Diarios de Dodgson aparece una entrada fechada el 11 de febrero de 1865: “Escribí al Sr. Yates, ofreciéndole elegir entre seudónimos:
1) Edgar Cutwellis [el nombre Edgar Cutwellis se obtiene reordenando las letras de Charles Lutwidge].
2) Edgard W. C. Westhill [el método para obtener un seudónimo es el mismo que en el caso anterior].
3) Louis Carroll [Louis de Lutwidge - Ludwick - Louis, Carroll de Charles].
4) Lewis Carroll [por el mismo principio de “traducción” de los nombres Charles Lutwidge al latín y la “traducción” inversa del latín al inglés].”
La elección recayó en Lewis Carroll. Desde entonces, Charles Lutwidge Dodgson firmó todas sus obras matemáticas y lógicas “serias” con su nombre real, y todas sus obras literarias con un seudónimo, negándose obstinadamente a reconocer la identidad de Dodgson y Carroll.
En la unión indisoluble del modesto y algo remilgado Dodgson y el extravagante Carroll, el primero claramente perdió frente al segundo: el escritor Lewis Carroll era mejor matemático y lógico que el “don” de Oxford Charles Lutwidge Dodgson.
Las obras de Lewis Carroll.
Un número significativo de libros y folletos sobre matemáticas y lógica indican que Dodgson era un miembro concienzudo de la comunidad científica. Entre ellos se encuentran el análisis algebraico del quinto libro de Euclides (El quinto libro de Euclides tratado algebraicamente, 1858 y 1868), Notas sobre planimetría algebraica (Un programa de estudios de geometría algebraica plana, 1860), Un tratado elemental sobre determinantes, 1867) y Euclides. y Sus modernos rivales (1879), Curiosidades matemáticas (Curiosa Mathematica, 1888 y 1893), Lógica simbólica (1896).
Los niños interesados Dodgson con juventud; Cuando era niño, inventó juegos, compuso cuentos y poemas y hizo dibujos para sus hermanos y hermanas menores. El apego inusualmente fuerte de Dodgson a los niños (y las niñas casi expulsaron a los niños de su círculo de amigos) desconcertó a sus contemporáneos, mientras que los críticos y biógrafos más recientes no dejan de multiplicar el número de investigaciones psicológicas sobre la personalidad del escritor.
De los amigos de la infancia de Dodgson, los más famosos fueron aquellos con quienes se hizo amigo antes que nadie: los hijos de Liddell, el decano de su universidad: Harry, Lorina, Alice (Alice), Edith, Rhoda y Violet. Alice era una de sus favoritas y pronto se convirtió en la heroína de las improvisaciones con las que Dodgson entretenía a sus jóvenes amigos en los paseos por el río o en casa, frente a la cámara. Contó la historia más extraordinaria a Lorina, Alice y Edith Liddell y al canónigo Duckworth el 4 de julio de 1862 cerca de Godstow, en la parte superior del Támesis. Alice le pidió a Dodgson que escribiera esta historia en un papel, lo cual hizo durante los siguientes meses. Luego, siguiendo el consejo de Henry Kingsley y J. MacDonald, reescribió el libro para una gama más amplia de lectores, añadiendo varias historias más contadas anteriormente a los niños Liddell, y en julio de 1865 publicó Las aventuras de Alicia en el país de las maravillas. Continuado, también de primeras historias y historias posteriores contadas a los jóvenes Liddell en Charlton Kings, cerca de Cheltenham, en abril de 1863, aparecieron en la Navidad de 1871 (1872) bajo el título A través del espejo y lo que Alicia encontró allí. Ambos libros fueron ilustrados por D. Tenniel (1820-1914), quien siguió exactamente las instrucciones de Dodgson.
Tanto Wonderland como Through the Looking Glass hablan de eventos que suceden como en un sueño. Dividir la narrativa en episodios permite al escritor incluir historias que juegan con dichos y refranes comunes, como “la sonrisa del gato de Cheshire” o “el sombrerero loco”, o juegan con situaciones en juegos como el croquet o las cartas. A través del espejo tiene una mayor unidad argumental en comparación con el País de las Maravillas. Aquí Alice se encuentra en un mundo reflejado y participa en un juego de ajedrez, donde el peón de la Reina Blanca (esta es Alicia) llega a la octava casilla y se convierte en reina. Este libro también presenta personajes populares de canciones infantiles, en particular Humpty Dumpty, quien interpreta palabras "inventadas" en "Jabberwocky" con un aire cómicamente profesoral.
Dodgson era bueno en poesía humorística y publicó algunos de los poemas de los libros de Alice en el Comic Times (un suplemento del periódico Times) en 1855 y en la revista Train en 1856. Publicó muchas más colecciones de poesía en estas y otras publicaciones periódicas. , como College Rhimes y Punch, de forma anónima o bajo el seudónimo de Lewis Carroll (el nombre inglés Charles Lutwidge fue latinizado por primera vez para convertirse en Carolus Ludovicus, y luego los dos nombres se invirtieron y se volvieron a anglicanizar). Este seudónimo se utilizó para firmar tanto los libros sobre Alicia como los poemarios Fantasmagoria (Phantasmagoria, 1869), ¿Poemas? ¿Significado? (¿Rima? ¿Y razón?, 1883) y Tres atardeceres (1898). También se hizo famosa la epopeya poética del género del disparate, La caza del Snark (1876). La novela Sylvie y Bruno (Sylvie y Bruno, 1889) y su segundo volumen, La conclusión de Sylvie y Bruno (Sylvie y Bruno Concluded, 1893) se distinguen por la complejidad de su composición y la mezcla de elementos de una narrativa realista y una cuento de hadas.
El maravilloso mundo de Lewis Carroll ha encantado a grandes y pequeños durante casi ciento cincuenta años. Los libros sobre Alice se leen en todo el mundo. Y aún más sorprendente es su creador, un matemático serio y pedante por un lado y un soñador, mejor amiga niños - por el otro.
Los libros de Carroll son un cuento de hadas entrelazado con la realidad, un mundo de ficción y lo grotesco. El viaje de Alice es un camino por el que se desliza libremente la imaginación de una persona, libre de las cargas de la vida “adulta”, por eso los personajes que encuentra en el camino y las aventuras vividas por Alice son tan cercanas a los niños. El universo de Alice, creado en un impulso momentáneo, conmocionó al mundo entero. Probablemente ninguno obra de arte En el mundo no tiene tantos lectores, imitadores y haters como las obras de Lewis Carroll. Al enviar a Alice a la madriguera del conejo, el autor ni siquiera imaginó adónde llevaría su imaginación a la pequeña heroína, y ciertamente no sabía cómo su cuento de hadas resonaría en los corazones de millones de personas.
El viaje de Alicia al País de las Maravillas y al misterioso A Través del Espejo transcurre como en un sueño. Los viajes en sí difícilmente pueden considerarse una narración lógicamente completa. Es más bien una serie de eventos brillantes, a veces absurdos, a veces divertidos y conmovedores, y encuentros memorables con personajes. Nuevo dispositivo literario– fragmentación de la narrativa en episodios – nos permitió reflejar el color vida británica, eche un vistazo a los pasatiempos tradicionales ingleses como el croquet y juegos de cartas, juega con dichos y refranes populares. Ambos libros contienen muchas canciones infantiles, cuyos personajes más tarde se hicieron muy populares.
Según los críticos, Lewis Carroll era especialmente bueno con los poemas humorísticos. Publicó su poesía por separado en revistas populares como The Times, Train y College Rhimes. Luminaria de la ciencia matemática, autor de trabajos científicos serios, no se atrevió a publicar sus "frívolos" trabajos bajo su propio nombre. Entonces Charles Latwidge Dodgson se convirtió en Lewis Carroll. Este seudónimo apareció tanto en libros sobre las aventuras de Alicia como en numerosas colecciones de poemas. Lewis Carroll es también autor de La caza del Snark, un poema al calor del absurdo, y de las novelas Sylvia y Bruno y La conclusión de Sylvia y Bruno.
Las creaciones de Carroll son una mezcla de parodia y cuento de hadas. Viajando a través de las páginas de sus obras, nos encontramos en un increíble mundo de fantasía, tan cercano tanto a nuestros sueños como a las realidades de nuestra vida cotidiana.
Lewis Carroll, nombre real: Charles Lutwidge Dodgson (Dodson). Fecha de nacimiento: 27 de enero de 1832. Lugar de nacimiento: el tranquilo pueblo de Dersbury, Cheshire, Reino Unido. Nacionalidad: Británica hasta la médula. Señales especiales: ojos asimétricos, las comisuras de los labios hacia arriba, sordo en el oído derecho; tartamudea. Ocupación: Profesor de Matemáticas en Oxford, diácono. Aficiones: fotógrafo aficionado, artista aficionado, escritor aficionado. Destaca el último.
Nuestro cumpleañero, de hecho, tiene una personalidad ambigua. Es decir, si lo representas en números, obtienes no uno, sino dos, o incluso tres. Nosotros contamos.
Charles Lutwidge Dodgson (1832 - 1898), graduado con honores en matemáticas y latín, en los años siguientes profesor en la Universidad de Oxford, además de curador del club de enseñanza (¡con las peculiaridades inherentes al estatus y a la institución!), un próspero y ciudadano excepcionalmente respetable de la sociedad victoriana, que envió durante su vida más de cien mil cartas escritas con letra clara y cuidada, el piadoso diácono Iglesia de Inglaterra, el fotógrafo británico más talentoso de su tiempo, un matemático talentoso y un lógico innovador, muchos años adelantado a su tiempo: eso es todo.
Lewis Carroll, el querido autor de las obras clásicas Alicia en el país de las maravillas (1865), A través del espejo (1871) y La caza del Snark (1876), era un hombre que pasaba las tres cuartas partes de su tiempo libre con niños. , capaz de contar incansablemente a los niños durante horas cuentos de hadas, acompañándolos de divertidos dibujos, y, saliendo a caminar, cargando su bolso con todo tipo de juguetes, rompecabezas y regalos para los niños que pudiera encontrar, una especie de Papá Noel para cada día - son dos.
Quizás (¡sólo quizás, y no necesariamente!), también hubo un tercero: llamémoslo “Invisible”. Porque nadie lo ha visto nunca. Un hombre sobre el que, inmediatamente después de la muerte de Dodgson, se creó especialmente un mito para tapar una realidad que nadie conocía.
Al primero se le puede llamar un profesor exitoso, al segundo un escritor destacado. Carroll III es un completo fracaso, Boojum en lugar de Snark. Pero fue un fracaso a nivel internacional, un fracaso sensacional. Este tercer Carroll es el más significativo, el más brillante de los tres, no es de este mundo, pertenece al mundo del Espejo. Algunos biógrafos prefieren hablar sólo del primero, Dodgson el científico, y del segundo, Carroll el escritor. Otros insinúan deliberadamente todo tipo de peculiaridades del tercero (¡de quien casi no se sabe nada, y lo que se sabe es imposible de probar!). Pero, de hecho, Carroll, como un terminador líquido, tenía todas sus hipóstasis a la vez, aunque cada una de ellas con todo su ser refutaba a las demás... ¿Es de extrañar que tuviera sus propias rarezas?
La ironía del destino o la peluca amarilla
Lo primero que me viene a la mente cuando se menciona a Lewis Carroll es, curiosamente, su amor por las niñas pequeñas, incluida Alice Liddell, una niña de siete años de belleza con amplias fajas. con los ojos abiertos, la hija del rector, que gracias a Carroll se convirtió en la Alicia de un cuento de hadas.
Carroll, de hecho, fue amiga de ella durante muchos años, incluso después de casarse con éxito. Tomó muchas fotografías maravillosas de la pequeña y grande Alice Liddell. Y otras chicas que conozco. Pero "los búhos no son lo que parecen". Como señala la reina de los estudios rusos Carroll, N.M. en su estudio. Demurova, la conocida versión del “pedofilismo” de Carroll es, por decirlo suavemente, una gran exageración. El hecho es que familiares y amigos fabricaron deliberadamente muchas pruebas sobre el supuesto gran amor de Carroll por los niños (y las niñas, en particular) para ocultar su vida social demasiado activa, que incluía muchas amistades con "niñas" de una edad bastante madura. comportamiento que en ese momento era absolutamente imperdonable tanto para un diácono como para un profesor.
Después de haber destruido selectivamente gran parte de su archivo inmediatamente después de la muerte de Carroll y haber creado una biografía muy “empolvada”, los familiares y amigos del escritor momificaron deliberadamente su recuerdo como una especie de “abuelo Lenin” que realmente amaba a los niños. No hace falta decir cuán ambigua se ha vuelto esa imagen en el siglo XX. (¡Según una de las versiones "freudianas", Carroll desarrolló su propio órgano reproductor a imagen de Alicia!) La reputación del escritor, irónicamente, fue víctima de una conspiración boca a boca, creada precisamente con el objetivo de proteger su buen nombre y presentándolo bajo una luz favorable ante sus descendientes...
Sí, incluso durante su vida, Carroll tuvo que "conformarse" y ocultar su vida versátil, activa y, a veces, incluso tormentosa, bajo una máscara impenetrable de respetabilidad victoriana. No hace falta decir que es una tarea desagradable; Para un hombre de principios como Carroll, esto era sin duda una carga pesada. Y sin embargo, al parecer, en su personalidad se escondía una contradicción más profunda, más existencial, además del temor constante por su reputación de profesor: "Oh, ¿qué dirá la princesa María Aleksevna?".
Aquí nos acercamos al problema de Carroll el Invisible, Carroll el Tercero, que vive en la cara oscura de la Luna, en el Mar del Insomnio.
Dicen que Carroll sufría de insomnio. En 2010, tal vez, finalmente se filmará y estrenará un largometraje kitsch, cuyo personaje principal será el propio Carroll. La película, que cuenta con el apoyo de maestros del cine como James Cameron y Alejandro Jodorowsky, debería llamarse "Phantasmagoria: La visión de Lewis Carroll" y está dirigida por ¿quién crees? - nada menos que... ¡Marilyn Manson! (Escribí más sobre esto).
Sin embargo, aunque Carroll sufría insomnio por la noche, tampoco podía encontrar la paz durante el día: necesitaba constantemente mantenerse ocupado con algo. De hecho, Carroll inventó y escribió tantas cosas durante su vida que uno simplemente se sorprende (una vez más, uno recuerda involuntariamente al abuelo Lenin, que también se distinguía por su prolificidad literaria). Pero en el centro de esta vigorosa creatividad estaba el conflicto. Algo pesaba sobre Carroll: algo le impedía, por ejemplo, casarse y tener hijos, a quienes tanto amaba. Algo lo desvió del camino del sacerdote, que había emprendido en su juventud. Algo simultáneamente socavó su fe en los fundamentos mismos de la existencia humana y le dio la fuerza y la determinación para seguir su camino hasta el final. ¡Algo enorme, como el mundo entero revelado a nuestros ojos, e incomprensible, como el mundo invisible! Ahora sólo podemos adivinar qué era, pero no hay duda de la existencia de este "abismo" más profundo.
Así, por ejemplo, en el pasaje que Carroll (siguiendo el consejo de J. Tenniel, el artista que creó las ilustraciones "clásicas" de ambos libros sobre Alicia) eliminó durante la edición final, contiene una amarga queja sobre el doble - por no decir digamos una vida “de dos caras” que tuvo que llevar bajo presión social. Citaré el poema completo (traducido por O.I. Sedakova):
Cuando era crédulo y joven,
Levanté mis rizos, los cuidé y los amé.
Pero todos decían: “Oh, aféitalos, aféitalos,
¡Y consigue una peluca amarilla lo antes posible!
Y yo los escuché e hice esto:
Y se afeitó los rizos y se puso una peluca.
Pero todos gritaban al mirarlo:
"Para ser honesto, ¡esto no es lo que esperábamos en absoluto!"
“Sí”, dijeron todos, “no se sienta bien.
¡Es tan impropio de tu parte que te perdonará tanto!
Pero amigo mío, ¿cómo podría ahorrar? –
Mis rizos no podían volver a crecer...
Y ahora, cuando ya no soy joven y gris,
Y el viejo pelo de mis sienes se ha ido.
Me gritaban: “¡Vamos, viejo loco!”
Y me quitaron la peluca desafortunada.
Y sin embargo, mire donde mire.
Gritan: “¡Grosero! ¡Dudar! ¡Cerdo!"
¡Oh mi amigo! ¿A qué tipo de insultos estoy acostumbrado?
¡Cómo pagué por la peluca amarilla!
Aquí está él, " visible para el mundo risas y lágrimas invisibles para el mundo" de Carroll-invisible! La siguiente es una aclaración:
“Me compadezco mucho de ti”, dijo Alice desde el fondo de su corazón. "Creo que si tu peluca te quedara mejor, no se burlarían de ti de esa manera".
"Tu peluca te queda perfecta", murmuró Bumblebee, mirando a Alice con admiración. - Eso es porque la forma de tu cabeza es adecuada.
No cabe duda: una peluca, por supuesto, no es una peluca en absoluto, sino un papel social en general, un papel en esta loca representación que, según la vieja tradición de Shakespeare, se representa en el escenario del todo el mundo. Carroll, si, por supuesto, damos por sentado que en la imagen de Bumblebee Carroll se retrató a sí mismo o a su mitad "oscura" (recuerde el famoso autorretrato de Carroll, donde está sentado de perfil, sí, sí, esta es la Luna , ¡cuyo lado oscuro nunca será visible!) - así, Carroll está atormentado tanto por la peluca como por la falta de rizos, así como por la belleza y la ligereza de la infancia: estas "pelucas" que se ajustan perfectamente a niñas encantadoras.
Ésta es la pasión “única, pero ardiente” que atormenta al diácono: no quiere en absoluto tener sexo con niñas pequeñas, quiere volver a la infancia, idealizada en la imagen de Alice, de siete años, con “los ojos bien cerrados”. , que está naturalmente inmerso en ella propio país milagros! Después de todo, las niñas ni siquiera tienen que saltar madriguera del conejo dejar el mundo adulto en algún lugar, muy lejano. Y el mundo de los adultos, con todas sus convenciones, ¿vale la pena gastar la vida en él? Y en general, ¿cuánto vale realmente todo este mundo? vida social etc., se pregunta Carroll. Después de todo, las personas son generalmente criaturas extrañas que caminan con la cabeza en alto todo el tiempo y pasan la mitad de su vida acostadas bajo las sábanas. "¿Vida, que es sino un sueño?" (“La vida es solo un sueño”): así termina el primer cuento de hadas sobre Alicia.
La cabeza del profesor Dodgson
TRINIDAD:
Viniste aquí porque quieres.
Descubra la respuesta a la pregunta principal del hacker.
NEO:
Matriz... ¿Qué es la Matriz?
(conversación en una discoteca)
Hasta el punto de crujir de dientes, el muy espiritual Carroll estaba atormentado por la idea de un avance existencial y esotérico hacia el "presente", hacia el País de las Maravillas, hacia el mundo fuera de Matrix, hacia la vida del Espíritu. Él (¡como todos nosotros!) fue esa desafortunada “eternidad rehén del tiempo en cautiverio”, y era muy consciente de ello.
El carácter de Carroll se caracterizaba por una determinación inquebrantable de realizar su sueño. Trabajaba todo el día, sin siquiera detenerse a comer una comida normal (durante el día comía galletas “a ciegas”) y, a menudo, pasaba largas noches sin dormir investigando. Carroll, efectivamente, trabajaba como loco, pero el propósito de su trabajo era precisamente llevar su mente a la perfección. Era dolorosamente consciente de sí mismo encerrado en la jaula de su propia mente, pero trató de destruir esta jaula, sin ver un método mejor, con el mismo medio: la mente.
Poseedor de un intelecto brillante, un matemático profesional y un lingüista capaz, Carroll intentó precisamente con la ayuda de estas herramientas encontrar una salida, esa puerta tan prohibida hacia el interior. maravilloso jardín lo que le llevaría a la libertad. Las matemáticas y la lingüística son dos áreas en las que Carroll llevó a cabo sus experimentos, esotéricos y científicos al mismo tiempo, según desde qué lado se mire. Dodgson publicó alrededor de una docena de libros sobre matemáticas y lógica, dejando su huella en la ciencia, pero se esforzó por lograr resultados mucho más profundos. Jugar con palabras y números era para él una guerra con la realidad del sentido común, una guerra con la que esperaba encontrar la paz eterna, interminable e imperecedera.
Según sus contemporáneos, el diácono Carroll no creía en el tormento eterno del infierno. Me atrevo a sugerir que, además, admitió la posibilidad de ir más allá de los límites de la sintaxis humana ya durante su vida. Salida y transformación completa a otra realidad, una realidad que convencionalmente llamó el País de las Maravillas. Admitió - y deseó apasionadamente - tal liberación... Por supuesto, esto es sólo una suposición. Dentro tradición cristiana, al que, sin duda, pertenecía el diácono Dodgson, esto es impensable, sin embargo, por ejemplo, para un hindú, un budista o un sufí, tal desaparición de "Cheshire" es bastante natural (como la desaparición en partes o en su totalidad, para los ¡El mismísimo gato de Cheshire!).
Es un hecho que Carroll realizó incansablemente experimentos sobre una especie de "avance de Matrix". Habiendo abandonado la lógica del sentido común y utilizando la lógica formal como una palanca que "pone el mundo patas arriba" (o más bien, las combinaciones habituales de palabras que la gente usa para describir este mundo, en voz alta y para sí misma, durante la reflexión), Carroll "Buscamos a tientas científicamente" una lógica mucho más profunda.
Como se vio más tarde, en el siglo XX, en sus estudios matemáticos, lógicos y lingüísticos, el profesor Dodgson anticipó descubrimientos posteriores en matemáticas y lógica: en particular, la "teoría de juegos" y la lógica dialéctica de la modernidad. investigación científica. Carroll, que soñaba con volver a la infancia retrocediendo en el tiempo, estaba en realidad por delante de la ciencia de su época. Pero nunca logró su objetivo principal.
La mente brillante y perfecta de Dojon, matemático y lógico, sufrió, incapaz de superar el abismo que lo separaba de algo fundamentalmente incomprensible para la razón. Ese abismo existencial que no tiene fondo: puedes “volar, volar” hacia él. Y el anciano Dodgson voló y voló, volviéndose cada vez más solitario e incomprendido. Este abismo no tiene nombre. Quizás esto sea lo que Sartre llamó “náuseas”. Pero como la mente humana tiende a poner etiquetas a todo, llamémoslo abismo. Snark-Boojuma. Ésta es la brecha entre la conciencia humana que lucha por la libertad y la inhumanidad de su entorno.
Quienes lo rodeaban (parte del entorno) consideraban a Dojohn-Carroll un hombre con peculiaridades, un poco fuera de sí. Y sabía lo locos y extraños que eran todos los demás: personas que "piensan" con palabras mientras juegan al "croquet real" en sus propias cabezas. “Todos aquí están locos, tanto tú como yo”, dice gato de Cheshire Alicia. La realidad, cuando se le aplica la razón, se vuelve aún más loca. Se convierte, deconstruido, en el mundo de “Alicia en el país de las maravillas”.
La historia de vida de Dodgson-Carroll es una historia de búsqueda y desilusión, lucha y derrota, así como esa decepción-derrota especial que llega sólo después de la victoria al final de una larga búsqueda de toda la vida. Carroll, después de una larga lucha, ganó su lugar bajo el sol y el sol se apagó. "Porque el Snark *era* un Boojum, ya ves" - con esta frase (ofrecimiento de la cabeza o (de-)capitulación) termina la última obra famosa de Carroll: el poema sin sentido "La caza del Snark". Carroll consiguió un Snark, y ese Snark era Boojum. En general, la biografía de Carroll es la historia de Snark, quien *era* Boojum. El fracaso de Carroll fueron tres personas: Morfeo, que no encontró a su Neo, Trinity, que tampoco encontró a su Neo, y el propio Neo, que nunca vio Matrix tal como es. La historia de un terminador líquido que nadie amaba ni entendía bien, y que se disolvió en el olvido. Una historia que no te deja indiferente.
Carroll se vio envuelto en una pelea que ninguna persona razonable podría ganar. Sólo cuando (¡y si! ¡Y este es un gran si!) se trascienden los pensamientos, aparecen estados conocidos como intuición más allá de la mente. Carroll simplemente estaba tratando, sintiendo intuitivamente que lo necesitaba, desarrollar tal superpoder en sí mismo, salir del pantano tirándose del cabello. La intuición es superior a cualquier intelecto: la mente y el intelecto operan con la ayuda de las palabras, la lógica y la razón (en las que Carroll alcanzó alturas significativas) y, por lo tanto, son limitados. Sólo el estado de superlógica e intuición supera la lógica razonable. Si bien Carroll usaba su mente, era un buen matemático, un lógico innovador y un escritor talentoso. Pero cuando la "ciudad dorada" se presentó ante él - el País de las Maravillas, el Himalaya Radiante del Espíritu - escribió bajo la inspiración de algo sobrehumano, y estos destellos del Supremo se pueden ver incluso a través de la traducción: Carroll, como un derviche, gira en su danza mística, y ante la nuestra, palabras, números, piezas de ajedrez, poemas destellan con una mirada mental (¡y a veces irreflexiva!); finalmente, poco a poco, la textura misma del mundo, las líneas de Matrix, empieza a aparecer... ¿Es posible exigir más a un escritor? Este es su regalo para nosotros - algo que él sólo podía permitir que sucediera - nuestro querido tío Carroll, matemático visionario, diácono teatral, profeta humorístico con una extraña peluca amarilla.
Por supuesto, todo el mundo conoce muy bien los extraordinarios y muy peculiares escritor inglés Lewis Carroll (su verdadero nombre es Charles Lutwidge Dodgson). Pero el talento de Lewis Carroll no se limitó en modo alguno a la literatura. Algunos probablemente recordarán que también fue matemático, dio conferencias en Oxford durante un cuarto de siglo y diácono de la Iglesia de Inglaterra. Pero pocas personas recuerdan que Lewis Carroll también era fotógrafo. No sólo entusiasta, sino desinteresadamente apasionado y casi fanático.
Y esto era en una época en la que la fotografía amateur apenas estaba emergiendo y era un signo de cierta extrañeza, porque en aquellos años requería más esfuerzo por parte del fotógrafo aficionado que el que requiere hoy otra fotografía profesional. Pero primero lo primero.
Cocina Alexandra "Xie".
Sorprendentemente, el interés de Lewis Carroll por la fotografía se debió a... la falta de actividades. En 1856, ya profesor en Oxford, escribe en su diario: “Escribí al tío Skeffington pidiéndole que me consiguiera un aparato fotográfico, ya que quiero encontrar algo para mí además de leer y escribir”. Y en la primavera de ese año, él, junto con su colega y también fotógrafo aficionado Reginald South, fueron a Londres y compraron una cámara.
Las hermanas Liddell con atuendo chino.
La compra costó 15 libras, una cantidad muy importante para un profesor joven. Además, se necesitaban todo tipo de accesorios, ahora completamente olvidados: baños, matraces, vasos de precipitados, así como magnesio para la evaporación instantánea y una amplia variedad de reactivos para el revelado y la fijación.
Y la cámara en sí no era pequeña y no podía usarse sin un trípode especial. En general, “la única diversión”, como la llamaba el propio Carroll, requería cierta abnegación.
Alice Liddell a la edad de 7 años, 1859. (Prototipo del personaje Alicia del libro "Alicia en el país de las maravillas")
Sin embargo, ¡Lewis Carroll se dedicó a la fotografía durante veinticuatro años! Se las arregló para llevar a todos sus amigos al rojo vivo, porque, según los recuerdos, era modesto y tímido en vida ordinaria Lewis se convirtió en una persona completamente insoportable, tan pronto como tomó una cámara, quedó tan obsesionado con su pasatiempo. Pero esta afición dejó a sus descendientes muchas fotografías magníficas, que todavía hoy parecen muy valiosas, aunque aquellos eran los años románticos de la fotografía, cuando las reglas y las decisiones artísticas se formaban principalmente con la práctica.
Lewis Carroll se especializó en fotografía de retratos, y prefirió utilizarlos como modelos. personajes famosos(incluso intentó conseguir permiso para fotografiar a la reina Victoria) o niños. Durante un cuarto de siglo, ha habido muchas modelos de chicas, pero la más famosa, por supuesto, es Alice Liddell, la misma que se convirtió en el prototipo de Alice del libro principal de Lewis Carroll.
Alice, 7 años, 1860.
Alice era hija de uno de los decanos de Oxford, Henry Liddell, a quien Carroll conoció en el mismo 1856. En ese momento, Alice tenía 4 años y era la cuarta de los cinco hijos de Liddell.
Alicia Liddell
Lewis Carroll pronto se convirtió en amigo de la familia y Alice comenzó a aparecer en sus fotografías, siendo naturalmente relajada y artística al mismo tiempo.
Las hermanas Liddell (Edith, Lorina y Alice).
Ella misma recordó más tarde: “Mucho más interesante que ser fotografiado era acceder a una habitación oscura y verlo revelar grandes placas de vidrio”. Para un niño debió parecer auténtica magia.
Hallam Tennyson, 1857. Hijo del famoso poeta inglés Lord Alfred Tennyson
A lo largo de los años de su trabajo creativo, Lewis Carroll logró convertirse en uno de los fotógrafos más destacados de su generación, quizás el primero en introducir la naturalidad, la facilidad y los temas cotidianos en la fotografía de retratos (especialmente en los retratos infantiles).
Lo cual no era tan fácil, porque los equipos fotográficos de aquella época sólo permitían exposiciones largas, por lo que fue necesario convencer al niño de que se quedara quieto en una posición relajada durante 15 a 20 segundos. Una tarea nada trivial. Pero el resultado, a juzgar por las fotografías conservadas, valió la pena.
Kathleen ordenado, 1858.
Lewis Carroll pasó casi un cuarto de siglo tomando fotografías, pero en 1880 de repente dejó de hacerlo por completo. Aún no se sabe exactamente qué causó esto.
Alicia Jane Donkin.
Él mismo murió dieciocho años después, y todos los retratos infantiles que realizó, según su testamento, fueron distribuidos a las familias de los modelos.
Alicia Liddell (1870)
Lewis Carroll biografia corta descrito en este artículo.
Breve biografía de Lewis Carroll.
Lewis Carroll(nombre real Charles Lutwidge Hodgson) es un escritor, matemático, lógico, filósofo, diácono y fotógrafo inglés.
Nació 27 de enero de 1832 en Daresbury (Cheshire), en gran familia Sacerdote inglés. Le dieron un nombre doble, uno de ellos, Charles, pertenecía a su padre, el otro, Lutwidge, heredado de su madre. Desde pequeño, Lewis ha demostrado una inteligencia y una inteligencia extraordinarias. Educación elemental recibió en casa.
A la edad de 12 años ingresó en una pequeña escuela privada cerca de Richmond. Le gustaba estar allí, pero en 1845 tuvo que ir a la Escuela de Rugby.
En 1851 ingresó en una de las mejores universidades de Oxford, Christ Church. Estudiar le resultó fácil y gracias a su brillante habilidades matemáticas recibió conferencias en la universidad. Estas conferencias le reportaron buenos ingresos y trabajó allí durante los siguientes 26 años. De acuerdo con los estatutos de la universidad, se le exigía que adoptara el rango de diácono. Escribir cuentos cortos y comenzó a escribir poesía cuando aún era estudiante. Poco a poco sus obras fueron ganando fama. Se le ocurrió un seudónimo modificando su nombre real, Charles Lutwidge, y cambiando las palabras en algunos lugares. Pronto comenzaron a publicarlo publicaciones inglesas tan serias como Comic Times y Train.
El prototipo de Alice era Alice Liddell, de 4 años, una de los cinco hijos del nuevo decano de la universidad. Alicia en el país de las maravillas fue escrita en 1864. Este libro se hizo tan popular que fue traducido a muchos idiomas del mundo y filmado más de una vez.
Límites país de origen el científico se fue solo una vez en su vida, y en esto conservó su originalidad, viajando no a países populares como Suiza, Italia, Francia, sino a la lejana Rusia en 1867.
Lewis Carroll es una figura atípica en el mundo fotográfico mediados del 19 siglo. Los niños eran su tema favorito, y para quienes fotografiaba, el proceso era un placer, no una tortura (según recuerda la misma Alice Liddell, quien se convirtió en el prototipo de la heroína de la famosa trama de uno de los libros infantiles más famosos). ). Mientras configuraba su cámara, Carroll no dejaba de entretener a sus pequeñas con historias interesantes y hacerlas reír. Creó un entorno poco convencional, creó cuadros animados y vistió a las niñas con trajes que él mismo confeccionó, tomados prestados de amigos o del Museo Ashmolean de Oxford. También experimentó constantemente con la composición. las mejores fotos Carroll se caracteriza por ser un artista inventivo que no temía los movimientos poco convencionales. Tiene fotografías tomadas tanto en estudio como al aire libre. Sus hijos sonríen, ríen, se entristecen, fruncen el ceño, fingen estar dormidos, juegan, leen, se paran en los alféizares de las ventanas y miran desde detrás de los árboles. Carroll estaba familiarizado con el trabajo de fotógrafos contemporáneos de la intelectualidad artística inglesa, como los ya mencionados Railider y Cameron o Henry Robinson y Lady Howarden. Sin embargo, no se puede decir que haya sido influenciado de alguna manera por ellos. Desarrolló su propio estilo.
La modelo risueña también es algo bastante raro en un retrato fotográfico del siglo XIX. Los niños en las fotografías de Carroll suelen expresar emociones vívidas, a pesar de la exposición bastante prolongada. No todos los modelos adultos pudieron mantener la expresión de un sentimiento vivo e inmediato durante 10 a 20 segundos.
Quizás lo que intriga al espectador moderno en estas fotografías es la libertad inusual para el siglo XIX (según nuestro entendimiento) con la que se comportan los niños. Las fotografías están llenas de dinámica, las chicas muestran emociones, a menudo miran directamente al espectador, y esta mirada no siempre parece inocente. Es decir, en las fotografías de Carroll vemos niños vivos, no muy parecidos a pequeñas damas y caballeros tranquilos, colocados contra el fondo de un fondo pintado y tomando poses estándar en un estudio de retratos. Quizás si las fotografías hubieran incluido a adultos, se les habría percibido de otra manera. Alicia en el país de las maravillas, a quien nadie mira, se guía por sus propios pensamientos sobre el comportamiento correcto, cambia de roles, razona, pregunta, enseña, discute, se encuentra en los lugares más inesperados e incluso puede cambiar fácilmente de tamaño. Las pequeñas amigas de Lewis Carroll se comportan como sugiere el desarrollo del juego, al que no jugarían con todos los adultos.